📝24 de marzo de 2025 en el cielo ☁️✈️

Musik

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Estoy dispuesta a morir por encontrarme. No es alabanza a lo intangible ni rendición ante la deuda del sacrificio, de la muerte y el sufrimiento por amor al prójimo.

Tal vez muy poco se ha entendido de saberse listx para morir por encontrar a Dios en nosotrxs mismxs. Salirse del cuerpo para permitirse experimentar la conexión con lo más grande, íntimo y profundo: PRESENCIA y ATENCIÓN PLENA.

¿A dónde se mueve mi mundo si me detengo a llevarle airecito a cada célula? Si me entrego a la vida, permitiendo que mi cuerpa flote en el vacío y deje de navegar, todo el tiempo, en el océano disperso. Si le pierdo el miedo a la vida porque me tengo, y vivir con Dios en el corazón es mirar con amor hasta el infierno.

No.
No tiene nombre, ni una sola piel lo encarna.
No es una sola cosa o persona.
Está en todas partes.
Eres tú y soy yo.
Es la vida en sí.

Y se halla en el único sacrificio de atreverse a dejar morir TODO. Atravesar el sufrimiento de la vida como nos la enseñaron, y permitirse hallarse en lo más oscuro, en lo más denso, calando el tiempo, la historia, el control, el miedo, en búsqueda de la luz que solo encuentro cuando respiro.

Entonces empezarás a vivir el milagro de la vida. Ser leal a ti mismx como lo fue Jesús. No murió por nosotrxs, murió por encontrarse a sí mismo y asumir el precio de compartir su luz en tierras cegadas por la materia.

No hay golpe más grande al imperio.
No hay control, ni manipulación.
Ni es más ni es menos la vida.
Cada espíritu se expresa a través del cuerpo que lo encarna, cuando separas la conciencia de lo bueno y lo malo, de la culpa, el miedo y la vergüenza.

No es posible corromper la consciencia despierta, ni al corazón que vibra en amor. Porque no solo te amas a ti mismx, sino a todo lo que te rodea, sin distinción.

¿Primero es la conciencia y luego el amor? ¿O es por amor que me abro a la conciencia? Sí, ya lo sé. Me han dicho que uno es primero. Pero tal vez no hay un orden. Tal vez se necesitan mutuamente para encenderse. Y en ese fuego, dejarse morir para volver a nacer.

Y en ese fuego, dejarse morir para volver a nacer.

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– Lali Wolf